sábado, 4 de julio de 2009

CALAMARO TOTAL en el diario "El Comercio"


Cantante argentino lanza nuevo disco

Calamaro total.

EN “ANDRÉS: OBRAS INCOMPLETAS”, EL PROLÍFICO CANTANTE ARGENTINO COMPILA SUS MEJORES CANCIONES E INCLUYE TEMAS INÉDITOS. SE TRATA DE UNA MONSTRUOSA ANTOLOGÍA DE SEIS DISCOS DE AUDIO Y DOS DVD CON VIDEOCLIPS E IMÁGENES REGISTRADAS EN CONCIERTO

Por: Rafael Valdizán

No para y piensa en grande. Siempre. Si los cinco discos de “El salmón” eran una desmesura, el buen Andrés lo hizo otra vez: una caja negra, más de 100 canciones para escuchar a lo largo de seis compactos, dos DVD para tener a Calamaro en pantalla; éxitos, rarezas, olvidos; un libro de 184 páginas. Si con todo esto usted no se conmueve, saque cita con un terapeuta. “Andrés: obras incompletas” (Warner Music) viene en empaque de antología, puede tomarse como una retrospectiva, pero también como un desafío a la propia ambición del argentino, sabida su predilección por lanzar discos como granadas, gesto que sus fanáticos, obviamente, agradecen con fruición.


“Obras incompletas” era un viejo plan de Calamaro. Para ello, se sentó a escuchar sus composiciones durante un par de semanas (o más), picó de aquí o allá, entre sus obras más populares dentro del rock, entre aquellas que aterrizaron en vertientes estéticas más diversas (llámense tangos, salsas o ideas que brotaron desde las noches de bohemia), y entre canciones que nunca antes vieron la luz. La selección vino luego, así como la distribución de espacios: los temas no han sido ubicados en orden cronológico.


Así, esta monumental obra posee todo cuanto se podría esperar del ex integrante de Los Abuelos de la Nada y Los Rodríguez. Desde sus creaciones más conocidas, como “Flaca”, “El loco”, “La parte de adelante” o “Paloma”, hasta piezas más recientes, ubicadas en “La lengua popular” (su disco en estudio del 2007), como “Los chicos” (una oda guitarrera a los amigos de Andrés que partieron a mejor vida), “Carnaval de Brasil”, “5 minutos más (minibar)” o “Mi gintonic”. Pero también hay muchas canciones inéditas (aunque algunas de ellas aparecieron on line).


Como cereza arriba del pastel, Calamaro llena el sexto disco de la caja con versiones de terceros: se manda con el “Wish You Were Here” de Pink Floyd; se viste de Beatle para bombear “Helter Skelter” y “Golden Slumbers”; saca lustre a “El día que me quieras” (Gardel) y entrega una joya con la versión de “Adagio a mi país”, del uruguayo Alfredo Zitarrosa.


Si usted piensa que Andrés ha quedado exhausto tras este maratónico lanzamiento, se equivoca. No se sorprenda si en unos meses este exponente fundamental de la música latinoamericana nos regala otro disco. Bárbaro.

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